Esfinge

La Esfinge era un demonio de destrucción y mala suerte, que se representaba con rostro de mujer, cuerpo de león y alas de ave. 
Se menciono que tenía el rostro pálido, la boca llena de veneno, ojos como brasas encendidas y las alas siempre manchadas de sangre. La Esfinge se estableció en una de las montañas al oeste de Tebas, y desde allí devoraba a todos los seres humanos que estuvieran a su alcanze y atormentaba al país. 
Antes de comerse a los viajeros, les imponía acertijos imposibles de resolver, con la condición de que si los respondían, no los devoraría.

La Esfinge tenia la habilidad de formular enigmas con facilidad y esto lo hacia a través del canto. La Esfinge cantaba sus enigmas y debido a esto se la llamo también la cruel cantora.